Rehabilitación integral de un edificio patrimonial con morteros de cal

Rehabilitación integral llevada a cabo en la Real fábrica de tabacos de A Coruña y actuales juzgados de la capital de la Provincia de A Coruña.

La fábrica fue inaugurada en 1804 albergando a 500 cigarreras de no más de 14 años. Esta cifra creció hasta tener en plantilla de unas 1400 trabajadoras. Los primeros conflictos que se registraron tuvieron lugar en 1831 y, el 7 de diciembre de 1857, tuvieron la primera huelga de mujeres en Galicia debido a las malas condiciones de trabajo y la mecanización de la fábrica.

Durante el siglo XIX se crearon diez fábricas de tabaco en España. La Coruña fue la segunda en ser creada y terminó siendo la más grande.

En 1999, Tabacalera se fusionó con la compañía francesa Seita dando origen a Altadis, que acordó cerrar la fábrica en diciembre de 2002.

EDIFICIO, INTERVENCIÓN Y PROBLEMATICA

La sede de la fábrica tiene su origen en los almacenes de los Mensajeros Marítimos instalados en 1764, adaptados como fábrica por el arquitecto Fernando Rodríguez Romay. En 1828 tuvo lugar la primera gran extensión, con la que se creó la nueva fábrica, cerrada y unida con la antigua en 1860. Después de varias ampliaciones posteriores, entre 1910 y 1925 se eliminaron algunas estructuras internas y se reformó la fachada de Palloza, que se convirtió en la principal, siendo la antigua como fachada lateral, pero conservando el póster.

En 2014, las obras de remodelación comenzaron a convertir el edificio en una sede judicial. Las nuevas instalaciones se inauguraron el 31 de marzo de 2017 y albergan la Audiencia Provincial, la Fiscalía y el Tribunal de Menores, entre otras secciones.

La rehabilitación fue la remodelación completa del edificio preservando la estética de la fachada exterior y patios interiores.

Los muros de patios interiores fueron los que en general presentaban la mayor problemática de patologías y una mayor intervención por su gran deterioro (Mas de 3500 m2).

  • Desconchados de cachotes de piedra  y  mortero antiguo.
  • Grietas y fisuras.
  • Remonte capilar
  • Desprendimiento de capas de caleo

La dirección facultativa de la obra nos pidió asesoramiento técnico para la remodelación de las fachadas de los patios interiores y nuestras soluciones constructivas en morteros de Cal, preservando así la estética antigua.

Se propuso a la Dirección facultativa de la obra y a empresa constructora, el uso de nuestras distintas soluciones de revestimientos de Cal. Gracias a sus propiedades, los morteros de Cal cumplen de manera satisfactoria los documentos básicos; protección frente a la humedad, Calidad del aire interior y protección contra el ruido. El uso de la Cal como conglomerante, proporciona a los morteros una propiedad bioclimática, al permitir transpirar al muro por su elevada permeabilidad al vapor de agua, dando confort y calidad del aire interior, a la vez que impermeabiliza frente al agua de lluvia

ACTUACIÓN

Preparación del soporte

El soporte debía ser resistente, estable y limpio de restos de polvo, para ello se eliminó las partes sueltas y sin cohesión rellenando a continuación con REVAT® CAL MURO. Se emplearon en el relleno piedras o cascotes en aquellas zonas donde requirieron gruesos importantes.

El REVAT® CAL MURO está clasificado como G-M5 según EN 998-2

Capa de regularización

Previo a la aplicación de la capa de acabado, se regularizó la superficie del soporte

con el mortero REVAT® CAL FONDO. Se procedió a la aplicación de este mortero de cal en un espesor medio de 50 mm (grandes problemas de planimetría), a unos 15 mm por capa. Se incluyó una malla de fibra de vidrio REVAT® 110 centrada en el espesor de la capa de regularización, para repartir las eventuales tensiones ocasionadas en el muro del edificio, especialmente fue aconsejada en el refuerzo de las esquinas de huecos de fachada. El REVAT® CAL FONDO está clasificado como GP–CSII-W0 según EN 998-1.

Capa de regularización e impermeabilización

Continuando con el proceso de regularización se aplicó REVAT® CAL ENFOSCADO BLANCO, en este caso ya un mortero de cal hidrofugado con elevada transpirabilidad (coeficiente de permeabilidad al vapor de agua _6). Su espesor medio fue de 10 mm. El tiempo de espera entre capas fue de mínimo un día. REVAT® CAL ENFOSCADO BLANCO está clasificado como GP-CSII-W2 según EN 998-1.

Capa de acabado y protección

La capa de acabado consistió en la aplicación de un estuco fino de cal fratasado. El REVAT® CAL ESTUCO BLANCO. Este se aplicó con llana en un espesor de 2 a 4 mm, y el día siguiente, el REVAT® CAL ESTUCO BLANCO, un estuco ultrafino de cal aplicado a llana y apretado repetidamente sobre la base de REVAT® CAL ESTUCO, en espesores inferiores a 1 mm, dejando un acabado “en aguas” brillante altamente decorativo. Finalmente, como protección y preservación de toda la fachada, se aplicó la solución impermeabilizante protectora REVAT® PROTEC ORG.